Si tu tarjeta de crédito no funciona, puede crear algunos problemas a la hora de recoger el coche de alquiler. También depende de quién tenga la culpa. Si la culpa es de la empresa de alquiler, por ejemplo, un mal funcionamiento del terminal, pide una confirmación por escrito de la situación y averigua si hay otra forma de conseguir el coche.
Si, por el contrario, la culpa es tuya, por ejemplo, tu tarjeta no tiene fondos suficientes para cubrir el depósito, ha caducado, no es una tarjeta de crédito, no está a nombre del conductor principal o no es aceptada por la empresa de alquiler (esta información debería figurar en las condiciones de alquiler ya en el momento de la reserva), entonces la empresa de alquiler puede negarse a entregarte el coche o a ofrecerte un seguro.
En caso de cualquier problema en el mostrador de alquiler, le aconsejamos que nos llame directamente a través del número que aparece en su bono.